Cuando una Isla Olvida Celebrar la Fortaleza de sus Niños
- Carlos A. Séllés, BS, DC

- 13 nov
- 4 Min. de lectura
En estos días, Puerto Rico fue testigo de algo que trasciende una carrera. No fue simplemente un evento deportivo. Fue la historia real de una niña de 9 años demostrando disciplina, enfoque, resiliencia y corazón… y la historia de una madre que la acompañó con amor, preparación y responsabilidad.
Esta niña completó el Lola Challenge, no por casualidad, no por capricho, no “a lo loco”, sino como resultado de un proceso guiado, supervisado y cuidadosamente planificado.

Su madre, doctora quiropráctica, caminó y corrió a su lado. No desde la imposición… sino desde el acompañamiento. No desde la ambición… sino desde la conciencia. No desde el ego… sino desde el amor.
Como quiropráctico con 30 años de experiencia quiero aportar algo que hace falta en este momento: contexto, equilibrio y humanidad.
No escribo para invalidar preocupaciones. Es natural que haya preguntas. Es normal que haya opiniones. Lo que no podemos permitir es dejar que la opinión reemplace la evidencia, o que el miedo silencie el mérito de una niña que hizo algo extraordinario.
Lo que dice la ciencia sobre niños corriendo largas distancias
La conversación pública se ha llenado de opiniones, temores y juicios. Pero la ciencia, cuando se busca correctamente, dice algo distinto.
Aquí te comparto lo que los estudios, publicados en revistas científicas, señalan:
1. Los niños pueden participar en carreras de distancia de manera segura cuando están bien entrenados.
Un estudio de revisión sistemática realizado por Paz y colaboradores en 2021 concluyó:
La literatura disponible sugiere que los jóvenes pueden participar en 'running' de distancia con mínimos efectos adversos.
Este análisis, que recopiló múltiples estudios en niños menores de 15 años, añade otro punto clave:
No se encontró correlación entre la cantidad de millaje recorrido y el riesgo de lesión.
Esto es impresionante cuando lo pensamos bien: la distancia en sí misma no es el problema. El problema, cuando aparece, suele ser entrenar mal, demasiado rápido o sin supervisión.
2. El consenso de expertos en medicina deportiva es claro: correr es seguro y saludable para niños.
El Youth Running Consensus Statement (Krabak et al., British Journal of Sports Medicine, 2021) afirma:
Correr es una actividad segura y saludable para los niños. Con entrenamiento estructurado apropiadamente, el riesgo de lesión es bajo. No hay evidencia que indique que los eventos de larga distancia causen daño a las placas de crecimiento cuando el entrenamiento es gradual y apropiado para la edad.
Así que, no, el cuerpo de un niño NO es de cristal.
El cuerpo de un niño está diseñado para moverse, adaptarse y fortalecerse.
3. No existe evidencia que demuestre que correr largas distancias sea inherentemente peligroso para la niñez.
Investigaciones adicionales en corredores infantiles concluyen:
No hay datos que sugieran que los niños están en riesgo de daño permanente al participar en running de distancia.
Siempre y cuando, y esto es importante... exista un entrenamiento ordenado, progresivo y supervisado, como ocurrió con esta niña.
Como en toda investigación, hay espacio para seguir explorando. Los estudios sobre niños y carreras de distancia aún son menos numerosos que los de adultos, por lo que es importante el acompañamiento profesional constante.
¿Y la fisiología infantil?
Los niños, en muchos sentidos, son más eficientes que los adultos:
Recuperan más rápido.
Se fatigan menos en esfuerzos aeróbicos prolongados.
Su metabolismo es más resistente en actividades sostenidas.
Su capacidad de adaptación muscular y neurológica es sorprendente.
El cuerpo de un niño es, en esencia, una máquina de aprendizaje y resiliencia.
Una ventaja silenciosa: criarse bajo cuidado quiropráctico
No pretendo convertir este caso en un argumento promocional para la quiropráctica. Pero sí es importante reconocer hechos simples:
Esta niña creció en un hogar donde el cuerpo importa.
Donde la postura importa.
Donde el movimiento importa.
Donde la salud se cultiva desde adentro, no se repara desde el afuera.
Y aquí también hay ciencia real.
Diversos estudios demuestran que intervenciones quiroprácticas pueden producir mejoras medibles en variables de desempeño deportivo, como:
Mayor velocidad de carrera (estudios en corredores jóvenes con mejoras tras ajustes en cadera).
Mejor altura de salto (Hedlund et al., 2014, en atletas femeninas jóvenes).
Mejor eficiencia en el swing de golf (Costa et al., 2009).
Mejor tiempo de reacción y movimiento (estudios de Smith y DeVocht).
¿Es esto “milagroso? No. Es biomecánica... es neurofisiología... es coordinación... ¡es quiroráctica!
Un cuerpo que funciona mejor, se mueve mejor. Y un cuerpo que se mueve mejor, se lesiona menos y rinde más.
Una niña criada dentro de una cultura de ejercicios, nutrición y cuidado quiropráctico... simplemente comienza su carrera atlética con más herramientas que el promedio.
🏅 A la madre
Gracias por demostrar que criar con ciencia, conciencia y preparación es un acto de amor. Gracias por representar lo que significa educar, acompañar y guiar.
🏅 A la niña
Desde QuiroHealth Centers te felicito. Tienes 9 años, pero corriste con el corazón de alguien mucho mayor. Lo que lograste no es común. Tampoco es suerte. Es disciplina, es enfoque y es salud.
Si decides seguir este camino atlético, tu futuro será brillante.
Un mensaje para Puerto Rico
No apaguemos lo que deberíamos celebrar. El movimiento es salud. La actividad física es vida. Y nuestros niños necesitan más espacio, no menos, para descubrir de lo que sus cuerpos son capaces.
Esta historia no debe provocar miedo ni crítica. Debe provocar inspiración.
Y lo más importante: el problema real, insidioso y silencioso que está afectando el desarrollo óseo, neurológico y físico de nuestra niñez NO es que una niña de 9 años corra un evento bien entrenada… es exactamente lo contrario.
El verdadero problema es la crisis de inactividad, la falta de deportes, la reducción del movimiento en los niños de nuestra isla… sumado a una mala alimentación cada vez más presente, alta en procesados, azúcar y baja en nutrientes reales, que compromete la salud, el crecimiento y el rendimiento físico de nuestros niños mucho más que cualquier evento deportivo.




Comentarios